En la piel del rostro pueden observarse manchas de todo tipo, desde las que tenemos de nacimiento, hasta las que hemos ido adquiriendo a lo largo de los años por diferentes motivos.

Hay muchas que no ofrecen ningún tipo de tratamiento posible, otras que requieren de un estudio mediante una biopsia para determinar los pasos a seguir con ellas y finalmente están las más comunes que pueden ser las originadas por un daño solar (manchas actínicas), por la edad (“seniles”), hormonales (como los melasma o Paños), o incluso las causadas por una determinada medicación.

En los casos que hemos denominado como los más comunes o habituales, además de la posibilidad de tomar precauciones para prevenirlas, podemos contar con algunas soluciones posteriores para eliminarlas o disimularlas.

Los tratamientos más frecuentes son:

• Tratamientos basados en el uso del láser
• Tratamientos de Luz intensa pulsada.
• Tratamientos con cremas despigmentantes y peelings

Una vez que hemos obtenido el resultado deseado, toma mucha importancia el hecho de hacer un mantenimiento utilizando filtros y bloqueantes del mecanismo químico formador del pigmento melanina.

Contactate Ahora Mismo